La implantación de prótesis capilares es un procedimiento utilizado para cubrir la pérdida de cabello en personas que sufren alopecia, calvicie o adelgazamiento del cabello.
Las prótesis capilares son dispositivos personalizados, que imitan la apariencia del cabello natural y se adhieren al cuero cabelludo, proporcionando finalmente un aspecto estético natural.
Una prótesis capilar es una solución no quirúrgica que consiste en una base (hecha de materiales como poliuretano o encajes transpirables) sobre la cual se colocan hebras de cabello (sintéticas o naturales).
Esta base se adhiere al cuero cabelludo y se integra con el cabello existente, creando una apariencia natural.
– Resultado inmediato sin intervención quirúrgica.
– Personalización según las necesidades estéticas del paciente.
– Posibilidad de obtener un cabello voluminoso y natural.
– Adaptación a diferentes grados de pérdida de cabello, desde pequeñas áreas hasta alopecias completas.
En primer lugar hay que realizar una evaluación inicial: El especialista en prótesis capilares realiza una evaluación del cuero cabelludo para determinar el grado de pérdida de cabello y definir el tipo de prótesis más adecuada.
Se toman las medidas exactas de la cabeza del paciente para personalizar la base de la prótesis, asegurando que quede ajustada y cómoda.
Se elige el tipo de cabello, también el color, grosor y textura que se asemeje al del paciente para lograr un resultado más natural.
La prótesis se adhiere al cuero cabelludo mediante un pegamento especial o cintas adhesivas de alta resistencia. Esta técnica no es invasiva y puede durar varias semanas o meses, dependiendo de la técnica y el tipo de prótesis.
Se debe realizar un mantenimiento regular para evitar que la prótesis se desplace o se deteriore. Este tipo de mantenimiento además, puede incluir el ajuste del adhesivo, la limpieza del cuero cabelludo y el cuidado del cabello.
Se utilizan cabellos humanos de alta calidad que brindan un resultado muy realista. Este tipo de prótesis se puede peinar, cortar y teñir como el cabello natural.
Utilizan materiales artificiales para imitar el cabello. Suelen ser más económicos, pero no ofrecen la misma naturalidad y flexibilidad que los de cabello natural.
Las prótesis suelen durar de 6 meses a 2 años, dependiendo del cuidado y el tipo de materiales utilizados.
Se recomienda lavar y cuidar la prótesis con productos específicos. Además, se deben programar visitas periódicas al especialista para su ajuste.
Las prótesis capilares ofrecen una solución eficaz y de aspecto natural, ideal para personas que buscan mejorar su apariencia sin someterse a tratamientos invasivos.